Iglesia El Tabernáculo de Dios
REFERENCIA BÍBLICA:
“... y serán reunidas delante de Él todas las naciones, y apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos.” (Mt 25:32)
INTRODUCCIÓN: El Señor Jesús de forma constante no dejó de predicar acerca de su venida, pues conoce la importancia que reviste este gran acontecimiento para la humanidad. Su nacimiento marcó la historia del mundo a tal extremo que logró dividirla en un antes y un después.
Eso nos indica que la vida de Jesús es transcendental para todos nosotros. Así mismo su muerte y resurrección, de este modo, más relevante será el rapto cuando aparezca en las nubes y levante a su pueblo, desde ese momento la historia cambia completamente y el tiempo de la Gracia habrá terminado. En función de esto debemos estar apercibidos y valorar todas aquellas actitudes que debemos desarrollar mientras esperamos su regreso por nosotros, no olvidando que Él lo prometió y fiel es para cumplirlo.
SU VENIDA ES UN HECHO: La escritura en muchísimos pasajes señala acerca de la segunda venida del Señor, se habla de su regreso como una parte esencial de su obra expiatoria en la Cruz. ÉL NOS DIO VIDA a través de su muerte, pues estábamos muertos en nuestros delitos y pecados. Cuando se habla de darnos vidas no se refiere a la vida física, pues estar en este mundo, poder respirar es sinónimo de estar vivo, sino que el Señor Jesús se refiere a la vida eterna, la cual se conseguirá cuando partamos de este mundo y dependiendo de nuestra decisión recibiremos vida eterna en gloria o condenación eterna en el infierno, aunque suene duro. Dios en su infinito amor hizo provisión para cada uno de nosotros, dice la Palabra que Él nos guiará mas allá de la muerte (Salmo 48:14).
En esta parábola nuevamente se hace alusión a la Segunda Venida del Señor Jesucristo, comienza el pasaje diciendo que “cuando El Hijo del Hombre (Jesús) venga en su Gloria con todos sus santos ángeles se sentará en su trono de gloria… “(Mt 25:31). Está aseverando en este versículo que es la segunda venida no el rapto, pues allí el vendrá a reinar. Así cuando las naciones estén delante de ÉL APARTARÁ A LOS UNOS Y A LOS OTROS, como el pastor aparta a las ovejas de los cabritos.
OVEJAS Y CABRITOS: En la tradición propia de ese tiempo y del lugar donde Jesús relata esta parábola la labor del pastor es muy conocida, por lo cual señala que cuando las naciones estén presentes delante de él, apartará los unos de los otros, está refiriéndose al juicio donde cada uno recibirá su recompensa de acuerdo a su actitud asumida en vida, pues recordemos que Dios nos dio libre albedrío, es decir, la capacidad de decidir sobre nuestras vidas y nuestras acciones, Esta capacidad que se nos delegó deberá ser justificada delante de DIOS. En otras palabras, cada uno responderá ante nuestro Salvador por lo que hicimos en nuestras vidas. Las ovejas pastan junto con los cabritos, sin embargo, cuando las ovejas van hacer trasquiladas son separadas. Así mismo ocurrirá cuando El Hijo del Hombre se siente en su trono a juzgar las naciones. Cuando se habla de ovejas y cabritos está refiriéndose a creyentes e incrédulos respectivamente (Mt 25:32). Las ovejas son sinónimos de mansedumbre y obediencia, los cabritos son sinónimo de desorden y desobediencia.
OVEJAS A SU DERECHA Y CABRITOS A SU IZQUIERDA: Continúa la parábola señalando algunos aspectos muy importantes en la vida de los hijos de Dios, las cuales serán consideradas cuando Jesús se siente en su trono y juzgue a las naciones. Dice en Mateo 25:33 que El Señor Jesús hará una selección y a cada grupo los colocará en posiciones diferentes, a sus ovejas las pondrá a su derecha y a los cabritos los colocará a su izquierda.
Quizás estaremos preguntándonos el por qué de esta separación, pero dice la escritura que cada uno recibirá su recompensa según lo que haya hecho sea bueno o malo. Del lado derecho se colocarán los creyentes que hicieron y vivieron conforme a la Palabra de Dios, es decir, cumplieron el mandamiento de Dios de Amarle a Él sobre todas las cosas y amaron a su prójimo como a sí mismo. Estos recibirán lo que se señala en el versículo 34 de Mateo 25, donde se dice que El Señor les dirá. Venid benditos de mi padre, heredad el reino de mi padre…, pero del lado izquierdo colocará a los cabritos (Incrédulos), aquellos que no tomaron la Palabra de Dios y la pusieron por obra, pues no creyeron en Jesús ni en su palabra, en otras palabras no cumplieron sus mandamientos.
ACCIONES O ACTITUDES JUZGADAS: Desde el versículo 35 hasta el 36 se señalan todas aquellas acciones que los hijos de Dios cumplieron con sus hermanos, y El Señor Jesús señala que cuando se le hace un bien o favor a cualquier persona o prójimo es como si se lo hiciéramos a Él. Y de la misma manera se determinan las mismas acciones para los que hicieron caso omiso ante las necesidades de sus hermanos, creyendo que ellos no merecían ser atendidos o dignos de misericordia, por lo cual a esos cabritos El Rey juzgará severamente y les dirá: “… Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles” (Mt 25:41)
CONCLUSIÓN
Esta parábola es un llamado de reflexión para que cultivemos la misericordia y la brindemos a diario a todas aquellas personas que puedan necesitar de nosotros. Son gestos que no requieren de riquezas, de habilidad o inteligencia, no tenemos excusa alguna para desatender las necesidades de los demás, no podemos vivir de manera egoísta, encerrados en nuestros propios mundos, ignorando que hemos recibido la misericordia de Dios, que su amor nos ha alcanzado y que debemos reflejar con nuestras acciones el inmenso amor de Dios. La enseñanza principal de esta parábola no es quién sino qué cosas podemos hacer por los demás. La parábola habla del servicio genuino que podemos prestar al necesitado. No está dirigida a los pastores ni al gobierno, está dirigida a todos aquellos que hemos recibido el gran amor de Dios, por lo cual nuestras acciones deben ser un reflejo del amor y agradecimiento que sentimos por Dios.
“¿No es que partas tu pan con el hambriento, y á los pobres errantes metas en casa; que cuando vieres al desnudo, lo cubras, y no te escondas de tu carne? Entonces nacerá tu luz como el alba, y tu salud se dejará ver presto; é irá tu justicia delante de ti, y la gloria de Jehová será tu retaguardia. Entonces invocarás, y oirte ha Jehová; clamarás, y dirá él: Heme aquí. Si quitares de en medio de ti el yugo, el extender el dedo, y hablar vanidad; Y si derramares tu alma al hambriento, y saciares el alma afligida, en las tinieblas nacerá tu luz, y tu oscuridad será como el medio día; Y Jehová te pastoreará siempre, y en las sequías hartará tu alma, y engordará tus huesos; y serán como huerta de riego, y como manadero de aguas, cuyas aguas nunca faltan. Y edificarán los de ti los desiertos antiguos; los cimientos de generación y generación levantarás: y serás llamado reparador de portillos, restaurador de calzadas para habitar.” (Is 58: 7-12)
¡Dios te bendiga! Ministerio de Doctrina Escuela Dominical
