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La Parábola de los Talentos

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Referencia Bíblica:  “Porque al que tiene, le será dado, y tendrá más, y al que no tiene, aún lo que tiene le será quitado”. (Mateo 25: 29)

 

Introducción:

La Biblia es la palabra de Dios que le enseña al cristiano la manera  como debe conducirse durante su peregrinaje en esta tierra, estamos llamados a vivir conforme a lo que Cristo a hecho en nuestras vidas, pero hay un  versículo que muestra lo que Dios pide de nosotros: “Más vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciés las virtudes de aquel que nos llamó de las tinieblas a su luz admirable”1 Pedro 2:9.  El versículo es completo nos dice lo que somos pero también nos dice para que fuimos llamados. Dios no ve de esa manera, pero mientras estamos aquí somos siervos.

Repartición de los Talentos:

En la parábola de los talentos (Mt 25: 14-30)  el Señor Jesús hace una comparación entre un amo que decide irse del lugar por un tiempo, pero promete regresar,  antes de marcharse, reparte sus bienes entre sus siervos, tomando en cuenta sus capacidades le da a cada uno una cantidad específica de talento (dinero), en el el libro de Lucas se habla de minas (Lc 19:13),  y les dice: negociad ( trabajas con ellas, ponganlas a producir). De la misma manera Dios nos ha dado a cada uno un don, un talento, Él nos ha puesto un trabajo específico en su obra, nos ha dado potencialidades, capacidades diferentes. Estamos llamados a trabajar en la expansión del Reino de nuestro amado Jesús, por lo tanto, es primordial, atender con diligencia el trabajo que Dios nos ha llamado a realizar.  Así como el amo, Cristo prometió volver y cuando estemos en su presencia nos pedirá cuenta de nuestra labor, compromiso y responsabilidad en la extensión del evangelio.

Actitud de los siervos:

La palabra señala que: “Y el que había recibido cinco talentos fue y negoció con ellos y ganó otros cinco talentos. Asimismo el que había recibido dos, ganó también otros dos. Y el que había recibido uno fue y cavó en la tierra y escondió el dinero   de su señor” (Mt 25: 16- 18). Se refleja el trabajo realizado por los tres siervos que allí se señalan, dos fueron y realizaron una estupenda obra,  habian duplicado lo que se les había dado, fueron fructiferos para su amo, cuidaron los bienes que se les habían dado y fueron obedientes a la orden que el amo les dio. Pero el que sólo le dieron un talento, pensó que su amo era muy  duro, y decidió guardar el talento, este no dio ganancias a su amo.

Presentación de cuentas al amo:

La parábola continua diciendo que  así como el amo había prometido, regresó y llamó a sus siervos y les pidió cuenta de lo que habían hecho con  sus bienes.  Cada uno se presentó ante el amo, el que le habían dado cinco, le entregó los cinco  talentos con cinco talentos más, el que le habían dado dos, le dio dos talentos de ganancia, pero cuando llegó al que le habían dado un solo talento, este se excusó afirmando que él conocía a su amo, y que tuvo miedo de perderlo  y ser castigado, por lo cual se limitó a  guardar el talento, para presentarlo cuando el regresara. (Mt 25: 20-25)

Recompensa por la labor realizada:

El amó felicitó la labor de los dos primeros siervos, y les recompensó porque cumplieron fielmente con lo que el amo le había encargado, y les dijo: “… bien buen siervo y fiel, sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor” (Mt 25:21). Pero cuando llega el que se le dio un talento, el amo se molestó en gran manera, no aceptó la excusa del siervo y le reprochó su actitud tan negligente, lo llamó malo (Mt 25:26), porque tuvo la oportunidad de hacer lo bueno y no lo hizo, se conformó  con quedarse tranquilo, con los brazos cruzados, fue egoista. El amo mandó a que le quitarán lo que tenía y se lo dieran al que tenía diez talentos.  Y al siervo inútil fue echado en las tinieblas, donde será el lloro y el crujir de dientes (infierno).

Nuestro compromiso en el Reino de Dios:

En esta parábola el amo representa al Señor Jesús, los talentos simboliza todo lo  que Dios en su infinita misericordia nos ha dado, diversas capacidades o ministerios (predicar, evangelizar, enseñar, pastorear…), a otros les ha dado dones, y nos ha preparado para realizar una función en su obra, todos somos importantes para Dios, todos formamos parte del cuerpo de Cristo, nadie es más importante que otro, somos complemento uno del otro. Pero si debe quedar claro, que cada uno dispone en su corazón hacer la obra que se nos ha encomendado. El Señor a prometido volver y cuando lo haga, nos pedirá cuenta de lo que hicimos. ¿Qué estamos haciendo con los talentos que Dios nos ha dado? ¿Están produciendo los frutos que Dios espera?. Son preguntas que sólo nosotros mismos en la intimidad con Dios tendremos que hacernos y en oración pedirle a Dios que ponga en nosotros el hacer como el querer de su buena voluntad.  Cuando el Señor vuelva por nosotros, cada quien recibirá la recompensa por su trabajo en el Señor. Quizás vemos con desagrado que al que tiene se le dará, pero sólo aquellos que tienen es porque hicieron bien su trabajo y demostraron tener la disposición de dar frutos, a ellos se les dará lo que otros no valoraron y serán  echados en las tinieblas (infierno), aunque no es por obra, sino por fe, solamente el que tiene el Espiritu de Dios puede dar frutos dignos de arrepentimiento.

Conclusión:

Dispongamos nuestro corazón a servir al Rey de Reyes y Señor de Señores, pues el trabajo en el Señor no queda sin recompensa, no es en vano,   tenemos un regalo precioso que debemos compartir, el mensaje de salvación, el cual se puede transmitir de diferentes maneras y haciendo uso de las capacidades que Dios ha puesto en cada uno. Dios como recompensa nos permitirá entrar en el gozo de nuestro Señor.

“Y su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré: entra en el gozo de tu señor.” (Mt 25:21)


¡Dios te bendiga!                                                                                                                                                      Ministerio de Doctrina Escuela Dominical

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